Liderados por el Consejo Internacional de Aeropuertos -ACI World-, organismo al que pertenecen aeropuertos de todo el mundo y que desde 1991 desarrolla normas, políticas y prácticas que junto a informaciones y capacitaciones busca incrementar los estándares de calidad en la prestación de servicios y experiencias de clientes, los aeropuertos están alineados con el objetivo de ofrecer la tan anhelada seguridad y confianza en los viajeros al tiempo que evitar o al menos minimizar el alto riesgo de pérdidas económicas para el sector de la aviación y todos sus relacionados.
Es por este motivo que a disposición de todos los aeropuertos del mundo está el programa ACI Airport Health Accreditation -AHA- que les ofrece una evaluación en donde pueden verificar qué tan alineados están en sus prácticas para ofrecer servicios que ofrezcan esos estándares de confiabilidad que buscan actualmente todos los viajeros, al igual que un portal de medidas sanitarias en donde reportar los servicios aeroportuarios y los requisitos para pasajeros, que podrán ser consultados a su vez por los viajeros en la sección Check and Fly, siempre y cuando cada aeropuerto ingrese la información que deberá ser autosuministrada.
Con el mismo compromiso, y pensando en aspectos financieros, junto con la IATA, han elevado en octubre un llamado a los gobiernos de los diferentes países para que utilicen las pruebas con un enfoque reconocido y acordado internacionalmente para reabrir las fronteras de manera segura y poder reestablecer la conectividad mundial con miras a que la estructura de la aviación siga siendo viable pues estima que ésta sufriría una reducción histórica de un 60% (104.500 millones de dólares).
En palabras de su Director General Mundial, Lic. Luis Felipe de Oliveira: “La pandemia de Covid 19 sigue siendo una crisis existencial, y los aeropuertos, aerolíneas y sus socios comerciales necesitan asistencia financiera directa y rápida para proteger las operaciones y los trabajos esenciales. ACI e IATA están alineadas para pedir una acción gubernamental urgente para introducir esas pruebas y que se eliminen los requisitos de cuarentena. Sin esa acción no es una exageración que la industria se enfrente a un colapso”.
Es evidente que de esta crítica situación financiera no ha escapado ninguno de los eslabones que intervienen en la actividad turística y que las preocupaciones a este respecto siguen siendo una constante que no solo persiste sino que aumenta con el pasar de los meses y a la que en principio, no se le ve una solución a la vista sobre todo si tenemos en cuenta el nuevo aumento de cifras que se están viendo en algunos países que ya habían salido de la crítica situación inicial y que, sin duda, hace plantear serias dudas en la mayoría de las personas al momento de contemplar la posibilidad de armar maletas nuevamente.
Si bien en algunos países se ha visto cierto tipo de reactivación, la constante sigue siendo el autocuidado con la estricta observación de las medidas preventivas que contribuyan al bienestar no sólo personal sino el de toda la población.
Rosario Ortíz
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